Eran tres pequeñas tortugas muy importantes. Una se llamaba Pasado, era la que se encargaba de recordar los momentos felices; otra era Futuro, era la que siempre tenía las ideas claras en la cabeza: y la tercera era Presente, la cual no entendía por qué era importante. Un día soleado, salieron a dar un paseo tranquilo. Futuro decía dónde iban. Pasado memorizaba el camino de vuelta. Presente seguía sin saber qué hacer. De repente comenzó a llover y ninguna sabía qué hacer, entonces Presente dijo:
-¿ Y si nos refugiamos en aquella casa ?
Las tres tortugas corrieron a refugiarse a la casa, en la cual vivía una tortuguita que les preguntó sus nombres. Ellas respondieron:
-Yo soy Pasado y recuerdo los momentos felices.
-Yo soy Futuro y tengo planeado lo que hacer.
-Yo soy Presente, no sé hacer nada, pero he tenido la idea de venir.
La tortuga de la casa, sorprendida, dijo:
-Sí que sabes hacer algo, sabes disfrutar. Si no disfrutaras, Pasado no recordaría las cosas buenas y si no disfrutas, Futuro no puede pensar en qué más hacer. Tú eres muy importante, Carpe Diem.
Moraleja: siempre hay que aprovechar el momento y no centrarte en el pasado ni vivir en el futuro. Tienes que vivir en el presente y disfrutarlo al máximo porque, si no existe el presente, no hay pasado ni piensas en un futuro.
[Fábula escrita por Lourdes Martínez Terol, 2ºESO A. Curso 2018-2019]
No hay comentarios:
Publicar un comentario